Nancy Hernández, directora de Fenasopadres, advirtió este miércoles que las elecciones llevaron a los colegios a comprimir el cierre del ciclo escolar para garantizar los trámites de culminación.
«Aunque no hay actividades académicas en julio, esta fecha inesperada nos lleva a presionar mucho más, y a una pérdida de clases. Las clases deberían durar hasta junio», pero se perderán «al menos una o dos semanas del año escolar» porque de las elecciones, enfatizó.
El Plan de la República deberá tomar los planteles entre el 19 y 21 de julio, «lo que significa que se detendrán las actividades académicas».
En educación «no se puede recuperar», afirmó. «Por eso es importante que se respete el derecho a la educación».
Legalmente existen 200 días de actividad en el año escolar, de los cuales 180 deben ser actividades académicas. Sin embargo, desde antes de la pandemia «tenemos un problema con la jornada escolar actual» por la crisis de los servicios públicos. No hay agua, no hay electricidad y se promociona oficialmente el calendario mosaico para que los profesores puedan «empezar».
En el curso escolar 2022-2023, según el diagnóstico de la comunidad en 19 estados y el Distrito Capital, “más de un millón de niños han perdido la mitad del año escolar”. Este año escolar la situación se agrava, porque el ejecutivo «decide cuándo comienza el año escolar», y por eso perdimos dos semanas de nivel y recuperación, explicó el presidente de Fenasopadres.
Este curso escolar «la tendencia es a ser más grave que el año pasado», cuando un millón de niños recibieron sólo 30 días de clases. «Hay una situación de omisión por parte de las autoridades», afirmó. .
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