En lo que va de esta segunda mitad de la temporada, Ronald Acuña Jr. estaba decidido a mejorar su propio récord personal de bases robadas con los Bravos.
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El 2 de julio en Atlanta, al robarse dos toallas, bateó 38 en 83 juegos para superar el récord de 37 que había logrado en 2019, su segunda temporada en las Grandes Ligas.
Y después del Juego de Estrellas, tiene cinco en nueve juegos hasta el domingo, cuando hizo uno de dos intentos en Milwaukee para un total de 46, el número más alto en cualquier liga.
Guaireño tiene tres robos sobre el dominicano Esteury Ruiz, quien vuela las bases con los Atléticos de Oakland y tiene 43 estando en la lista de lesionados.
El destacado jardinero de Atlanta podría alcanzar los cincuenta robos antes de que finalice julio, con la tasa que mantiene en 46 pases completos en 54 intentos.
En camino a 30 HR y 50 BR
Esta edición de la racha de jonrones (lleva 23) y robos de Acuña Jr. ocupará mucho espacio mediático por el resto de la campaña.
En todos los 148 años de historia de las Grandes Ligas, desde 1876, solo dos jugadores, Eric Davis en 1987 y Barry Bonds en 1990, han logrado registrar sus nombres en el llamado Club 30HR-50BR.
Davis conectó 37 jonrones y robó 50 bases con los Cincinnati Reds hace 36 años, mientras que Bonds conectó 33 jonrones y robó 52 almohadillas con los Pittsburgh Pirates hace 33 años.
Acuña comienza una serie interliga de dos juegos contra los Medias Rojas hoy en el Fenway Park de Boston, donde tiene cuatro jonrones y cuatro robos en 17 juegos de carrera. Incluyendo esta racha, le quedan sesenta juegos para llegar a 30-50.