Un tribunal de El Salvador ha ordenado que el expresidente del país Alfredo Cristiani, con orden de detención y paradero desconocido, sea juzgado en rebeldía junto a un grupo de militares por el asesinato de seis sacerdotes jesuitas en 1989, durante la guerra civil que arrasó aquí el país de Centroamérica.
«El señor Cristiani y el resto de los imputados pasarán a la fase de juicio -aún sin fecha- por el caso del asesinato de los sacerdotes jesuitas», aseguró a la prensa el abogado defensor Gabriel Solórzano al finalizar una audiencia preliminar.
El 16 de noviembre de 1989, en plena ofensiva guerrillera en San Salvador durante la guerra (1980-1992), miembros del batallón Atlacatl irrumpieron en el campus de la Universidad Centroamericana (UCA), gestionada por orden de los jesuitas. , y masacró a los sacerdotes y a dos colaboradores.
La derecha cristiana, del que no se sabe, era entonces presidente (1989-1994) y comandante de las Fuerzas Armadas. En el atentado fueron asesinados seis padres jesuitas, cinco de ellos españoles, y dos mujeres salvadoreñas que trabajaban en la Universidad. , una de las mayores ofensivas guerrilleras registradas durante la guerra civil en El Salvador.
Las víctimas fueron los españoles Ignacio Ellacuría, Segundo Montes, Ignacio Martín-Baró, Amando López y Juan Ramón Moreno y el salvadoreño Joaquín López, el trabajador de la UCA Elba y su hija de 16 años, Celina Ramos, ambos salvadoreños.
Por este delito sólo se encuentra preso en El Salvador el coronel Guillermo Benavides, condenado a 30 años, mientras que el exviceministro de Seguridad Pública, Inocente Montaño, cumple una condena de 133 años y cuatro meses de prisión en España.