Luego de una ausencia de seis años, durante los cuales reaprender y reconstruir fue un compromiso, el lanzador venezolano Albert Suárez regresó a las Grandes Ligas para robarse aplausos y ovaciones de los fanáticos de Baltimore. En retrospectiva, el regreso fue mucho más especial que el estreno.
«Creo que disfruté este momento más que cuando llegué a las Grandes Ligas por primera vez. «Es increíble para mí», admitió el venezolano, quien inició el partido del miércoles reemplazando a Tyler Wells, quien fue colocado en la lista de lesionados con inflamación del codo.
«Es una buena sensación estar aquí», dijo, todavía incrédulo después de lanzar 5.2 entradas en blanco en las que permitió sólo tres hits, no dio boletos y ponchó a cuatro para mantener su inmaculada eficiencia.
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Seis años y 204 días es el tiempo exacto que el venezolano estuvo alejado del llamado mejor béisbol del mundo. Viajó por Asia, tres temporadas en Japón (2019-2021) y dos en Corea del Sur (2022-2023), convirtiéndose en un lanzador difícil de leer.
Un lanzador que ahora tiene otra oportunidad de jugar en Grandes Ligas como premio a su resiliencia.
“Trabajé duro para esto. Creo que cuando uno trabaja duro y cree en algo, las cosas suceden, concluyó el derecho de 34 años.