La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos presentó este martes 19 de marzo un informe oral sobre la situación en Venezuela. Entre los incidentes denunciados se encuentran nuevas restricciones al espacio cívico, informes de malos tratos y torturas a prisioneros y llamamientos a elecciones participativas y justas.
Al inicio de su intervención, la Alta Comisionada Adjunta Nada Al-Nashif lamentó la decisión del gobierno venezolano de suspender las actividades de la Oficina en el país, la cual concluyó a mediados de febrero. «Estas medidas son incompatibles con los términos de la Carta de Entendimiento acordada entre el Gobierno y mi Oficina».
En esta nueva comunicación oral, la Oficina del Alto Comisionado expresó su preocupación por casos de arrestos y detenciones injustificadas, así como despidos o restricciones en su acceso a beneficios sociales, como consecuencia de su participación en manifestaciones públicas.
Si bien reconoció los esfuerzos del Estado para reducir la delincuencia en general y destacó la disminución de los asesinatos en el contexto de operaciones policiales, la Oficina pidió a la administración de Maduro que tomara las medidas necesarias para poner fin a la impunidad por violaciones de derechos humanos.
El Alto Comisionado Adjunto enfatizó que desde enero de 2023 hasta hoy se han documentado 18 casos de desapariciones forzadas cometidas durante detenciones por parte de policías y agentes de servicios de inteligencia.
«Estas personas fueron detenidas por funcionarios del gobierno y mantenidas en régimen de incomunicación durante horas, incluso semanas. Durante este período no hubo reconocimiento de privación de libertad ni ocultamiento de su suerte o paradero. La mayoría de las personas enfrentaron posteriormente cargos de conspiración, terrorismo, asociación criminal, traición y lavado de dinero».
Nada Al-Nashif también destacó que han recibido denuncias de malos tratos por parte de agentes de policía o servicios de inteligencia, algunas de las cuales pueden constituir tortura. «Es particularmente preocupante la falta de avances en la investigación de los asuntos del pueblo indígena Yukpa en la provincia de Zulia por parte de agentes de la Policía Nacional Bolívar.»
La Oficina del Alto Comisionado señaló que el año pasado realizaron 7 visitas a centros de detención, con lo que asciende a 70 desde 2019. Pidieron a las autoridades mejorar las condiciones de detención además del agua, la comida y los servicios de salud.
También denunciaron la falta de avances hacia la despenalización del aborto, el reconocimiento de la identidad transgénero y el matrimonio civil entre personas del mismo sexo.
La Alta Comisionada Adjunta recordó que desde 2019 han dado recomendaciones sobre las condiciones de detención, realizaron seminarios para funcionarios públicos sobre obligaciones internacionales en materia de derechos humanos; revisiones y comentarios sobre proyectos de ley; además de apoyar el desarrollo de lineamientos para la investigación de delitos contra la vida y la integridad física.
Recientemente, el Alto Comisionado señaló que han ampliado la cooperación con el Ministerio de Pueblos Indígenas. «Puedo confirmar que se han producido cambios positivos desde la existencia del Tribunal Superior de Derechos Humanos en el país. Sin embargo, aún queda mucho trabajo por hacer», afirmó.
Dijo que esperan retomar pronto sus trabajos en el país, y que esperan «fortalecer nuestra cooperación con las autoridades venezolanas, siguiendo estrictamente el mandato de la Oficina, basado en el respeto mutuo, el diálogo sincero y transparente».
Agencias