Maracaibo. Al ingresar a la avenida que conecta la capital zuliana con el Aeropuerto Internacional La Chinita, un río de banderas tricolores dio la bienvenida al paso de la comitiva presidencial, esperando una cálida bienvenida del pueblo zuliano.
La noticia se difundió rápidamente y en los andenes de las estaciones del metro que marcaban el recorrido, mujeres y hombres de todas las edades saludaron al presidente de la República, Nicolás Maduro Moros.
El recorrido de la caravana presidencial no se detiene hasta llegar al espacio de la segunda etapa del Parque La Vereda del Lago, ubicado en la avenida El Milagro de Maracaibo y allí se ha reimpreso lo que sucede en cada ciudad donde se realizó la Visita Presidencial. . representante nacional.
El calor de 40 grados centígrados, en el sonoro sopor de la playa, como telón de fondo del recibimiento, no fue suficiente, pues cuando el presidente Nicolás Maduro Moros descendió del auto oficial, la alegría estalló y ya no quedó más aliento. Ya no hacía calor, sino que había mucha satisfacción entre las olas, de los pescadores que después de muchas horas encontraron sus expectativas cumplidas.
Maduro inspeccionó las labores de rescate en el lago de Maracaibo, donde lo esperaba un grupo de pescadores.
«Debemos tomar medidas para rescatar este lago sagrado porque el destino del país se decidió aquí con la batalla naval en el lago», afirmó.
De regreso por donde veníamos, hacia la nueva sede de la Universidad Bolivariana de Venezuela, en la avenida 5 de Julio, se desató la fiesta y toda la multitud se congregó a lo largo de todo el recorrido Presidencial.
Y así siguió un camino audaz y alegre, desafiando el calor que con el tiempo había dado paso al frescor de la tarde maracucha y apoyándose en los hombros de mujeres, hombres, niñas, niños, abuelos… Sra. que presenció el paso del Presidente Bajar de la caravana oficial y sumergirse en la zona verde del Parque Ana María Campos, para inaugurar las primeras 10 hectáreas con 4,5 zonas verdes y más de 10 canchas deportivas. Deportes, según órdenes manuscritas del mismo, comenzó la Segunda Fase seguir renovando la vida de los Maracaiberos.