El falconiano Magglio Ordóñez, considerado uno de los peloteros venezolanos más importantes que ha jugado en las Grandes Ligas, cumple hoy 50 años, habiendo dejado un gran legado tanto en la Liga Venezolana de Béisbol Profesional con los Caribes, como en la Gran Carpa, donde Protagonizó ocho temporadas con los Medias Blancas de Chicago y siete con los Tigres de Detroit, equipo al que llevó a la Serie Mundial de 2006 tras conectar un inolvidable jonrón contra los Atléticos de Oakland.
Este duro toletero, que además de una poderosa ofensiva se destacó como jardinero derecho, se convirtió en el segundo venezolano en ganar un título de bateo en las Mayores en 2007 al batear .363 con Detroit. Al hacerlo, se unió al primera base de Caracas, Andrés Galarraga, como campeón de bateo de 1993 al registrar un promedio de .370 con los Rockies de Colorado.
Falconiano se ubica como el tercer nativo con más jonrones en la MLB con 294 hits, detrás de Miguel Cabrera (511) y Andrés Galarraga (399). También es el cuarto venezolano con más carreras impulsadas en las Grandes Ligas con 1.236, solo superado por Miguel Cabrera (1.881), Andrés Galarraga (1.425) y Bob Abreu (1.363).
Su carrera en la LVBP
Magglio nació en Coro, estado Falcón, el 28 de enero de 1974. A los 17 años debutó con Caribes de Anzoátegui (antes Caribes de Oriente), en la temporada 1991-1992.
El jardinero jugó 10 temporadas en la LVBP. Apareció en 280 juegos en los que conectó 339 hits, incluidos 30 jonrones, 65 hits y 8 triples. También impulsó 184 carreras, anotó 108 y tuvo un promedio de por vida de .279. También robó 43 bases.
Destacó en la MLB
Magglio hizo su debut el 29 de agosto de 1997 con los Medias Blancas de Chicago. Jugó durante ocho temporadas con el equipo de Chicago. En 2005, Ordóñez ingresó a los Tigres de Detroit a los 31 años. En ese equipo, Ordóñez vivió los mejores años de su carrera con el madero.
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El 14 de octubre de 2006, Magglio conectó un jonrón de tres carreras en la novena que rompió un empate de tres carreras y envió a los Tigres de Detroit a la Serie Mundial para barrer a los Atléticos de Oakland en la Serie de Campeonato de la Liga. Americano. Fue su momento más glorioso.
