La noche de este martes 28 de febrero se registró un sismo en las cercanías de la ciudad de Puerto la Cruz, de magnitud 3,8, según un reporte de la Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas (Funvisis).
A pesar de que el movimiento sísmico se sintió en otras ciudades del Área Metropolitana del Estado Anzoátegui, como Barcelona y Lechería, no hubo señales de daños en estructuras ni fue necesario evacuar personas.
Así lo informó el titular del Sistema Integrado de Gestión de Riesgos y de la Administración Estatal de Emergencias y Desastres Civiles (Sigraed), comisionado de Energía Cano Nieto, quien también reconoció que había alarma entre la población.
Cano Nieto indicó que desde Protección Civil, Bomberos y Policía Regional, los efectivos estuvieron atentos y en constante seguimiento a través de las redes sociales, además de los recorridos de rutina.
“El sismo solo generó alarma entre la población y no recibimos reportes posteriores al evento. No hubo daños ni afectaciones”, explicó el funcionario.
El también titular del gabinete de seguridad ciudadana del ejecutivo regional, recordó a la población que, ante cualquier temblor, deben informar a las autoridades y seguir la información de las fuentes oficiales. También aconsejó mantener la calma.
El temblor sorprendió a muchos
La costa de Puerto La Cruz, en el mar Caribe, fue el epicentro del sismo de magnitud 3,8 que se registró a las 19:09 horas (19:09 horas), según un parte oficial de Funvisis.
El sismo, ubicado 40 kilómetros al norte de la ciudad anzoatiguense y 41 kilómetros al oeste de Araya (estado Sucre), tuvo una profundidad de 30,1 kilómetros.
Funvis También dijo que las coordenadas del epicentro del temblor se registraron en longitud 10,58 N y longitud 64,62 W.
La entidad adscrita al Ministerio de Relaciones Interiores, Justicia y Paz (Mpprijp), advierte en su sitio web que eventos de esta naturaleza son normales en Venezuela “ya que vivimos en un país sísmico. Estamos en un contexto geodinámico importante y complejo debido a la interacción entre las placas del Caribe y Sudamericana, lo que provoca actividad sísmica en el territorio nacional”.
Del mismo modo, refiere que “la zona de mayor actividad sísmica en nuestro país corresponde a una franja de unos 100 km de ancho, delimitada a lo largo de los sistemas montañosos de Los Andes, la Cordillera Central y la Cordillera Oriental, lugares donde se ubican los principales sistemas de fallas sismogénicas del país: Boconó, San Sebastián y El Pilar; a los que se suman otros sistemas activos menores como Oca-Ancón, Valera, La Victoria y Urica”.
cultura antisísmica
Las autoridades aconsejaron a los ciudadanos que después de un movimiento sísmico, deben revisar la casa por posibles daños, usar el teléfono solo en caso de emergencia para no saturar las líneas telefónicas, no encender fósforos ni velas hasta que estén seguros de que hay. no hay fugas de gas.
También recordarán que después de una gran actividad sísmica pueden ocurrir colisiones, por lo que es importante estar alerta.