Dicen que Estados Unidos puede hacerlo todo, incluso batir récords de número de camisetas vendidas por un jugador de béisbol y superar todas las marcas establecidas. Hace unos días, con la presentación en Los Ángeles de Shohei Ohtani, la enorme ciudad de California vivió un auténtico «Black Friday» en presencia de los japoneses, un auténtico tsunami de los vistos en sus lejanas tierras, pero esta vez traído a la pelota .
Millones de compradores, asombrados por la presencia del jugador, único en su especie, no quisieron perder el momento de llevarse a casa el uniforme visitante y establecer ventas sin precedentes en las dos primeras horas. La llegada a Estados Unidos de Lionel Messi también desató un furor de camisetas, lo mismo ocurrió en Arabia Saudita con Cristiano Ronaldo, pero todo ha quedado pálido, sin respuesta, ante la avalancha provocada por Ohtani…
Shohei Ohtani ha sido un caso especial y nunca ha sido visto desde que llegó a las grandes ligas con los Angelinos de Los Ángeles. Lanzando bolas de fuego a casa a más de 100 millas por hora, dando golpes que amenazan con romper la paz del cielo, ha roto profecías y leyendas. Babe Ruth fue un buen lanzador al principio, y luego fue el bateador más temible que recuerdo en el béisbol, pero nunca las dos cosas a la vez, como lo hace el temible asiático.
Los Dodgers, que venden más de tres millones de entradas cada año como líderes de las ligas mayores, ahora afirman haber batido todos los récords establecidos; De hecho, ya han colocado todos los billetes para la temporada 2024. Y todo por el «error» de un paleador zurdo que por momentos recoge la basura detrás de sus compañeros en el banquillo, que sonríe incluso bajo sus guardias en lo que está planchado, que bebe sake de vez en cuando y que, según un traductor que se parece a Kevin Costner cuidando a Whitney Houston, aún no ha aprendido a hablar inglés…
La ola de rumores habla del interés de Boca Juniors por Yeferson Soteldo. No sabemos hasta dónde puede llegar esa mirada, esas intenciones, porque sabemos que el fútbol es receptor de dichos y desmentidos. Algo de verdad debe haber en eso, porque la campaña del portugués con la Vinotinto y el Santos es algo digno de creer. Sería entonces todo un detalle ver a dos venezolanos en los dos frentes de ataque de una de las contradicciones más candentes del fútbol sudamericano: Salomón Rondón en River Plate, Jeferson Soteldo en Boca Juniors.
¿Se ha visto esto alguna vez en algún país? ¿Será posible encender la televisión y ver a los dos venezolanos enfrentados para ver quién marcará un gol para no olvidar?
Te veo allí.