El Estado venezolano rechazó este martes la decisión de la Corte Penal Internacional (CPI) de autorizar la reanudación de la investigación por presuntos crímenes de lesa humanidad, por lo que recurrió ante la Sala de Apelaciones de la Alta Corte.
A través de un comunicado, la Cancillería denunció la intención de Estados Unidos de buscar un cambio de gobierno en el país.
“La República Bolivariana de Venezuela expresa su disconformidad con la decisión adoptada por la Sala de Cuestiones Preliminares de la Corte Penal Internacional (…) Venezuela ha denunciado la intención de explotar los mecanismos de la justicia penal internacional con fines políticos, vinculados a la estrategia de «cambio de régimen», promovido por las autoridades de los Estados Unidos de América».
En la carta, difundida por Twitter, el Ejecutivo «lamenta que esta decisión se preste a alentar y contribuir a esta maniobra, que claramente desvirtúa la razón de ser de la CPI y socava su credibilidad como órgano de justicia internacional, a pesar de toda la información». que se ha puesto a su disposición.
El gobierno venezolano niega que se hayan registrado crímenes de lesa humanidad en el país.
“Como parte de esta estrategia, operativos políticos nacionales e internacionales han tratado de sustentar una acusación de presuntos crímenes de lesa humanidad que nunca sucedieron, basados en la manipulación deliberada de un reducido grupo de crímenes contra los derechos humanos que han sido o han sido investigados. y sancionado por las autoridades de la Justicia venezolana”.
Asimismo, expresó la decisión de apelar y defender la verdad
“Venezuela apelará esta decisión ante la Cámara de Apelaciones, mientras seguirá utilizando las acciones previstas en el Estatuto de Roma y el derecho internacional para defender la verdad y garantizar sus derechos como Nación, frente a esta ofensiva que utiliza abiertamente la institucionalidad de la Corte Penal Internacional para fines contrarios a su naturaleza y a los objetivos perseguidos con su creación”.