En mayo de 2004, hace diecinueve temporadas, la última vez que los Gigantes ganaron diez seguidas, el jardinero venezolano Luis Matos tenía apenas dos años.
El miércoles pasado, el novato de 21 años de Trujillo se fue de 4-2 con un robo y anotó la primera carrera de los Gigantes en una victoria de 4-2 contra los Padres que les permitió registrar su décimo juego consecutivo desde el 11 de junio.
Matos fue llamado a las Grandes Ligas por los Gigantes el 14 de junio e hizo su debut en las Grandes Ligas el mismo día. Desde entonces, hasta el miércoles por la noche, ha tocado el plato diez veces en sus primeros siete juegos y se ha embasado siete veces.
En la quinta entrada del juego del miércoles, encendió la mecha que aprovechó el rally clave de cuatro carreras. Comenzó la tanda con un hit contra Yu Darvish, un roletazo en el tercer y corto espacio que tomó el campocorto de Curazao Xander Boagerts, sin tiempo para disparar.
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Luego se robó la segunda, avanzó a la tercera con un tiro de Brake Sabol y anotó con un elevado de sacrificio de Brandon Crawford.
Por segunda vez en su corta permanencia con los Gigantes, Matos logra duplicar la ofensiva. Anteriormente lo hizo contra los Dodgers el 17 de junio en Los Ángeles, yendo de 5-2 con un par de bases por bolas y cuatro carreras anotadas en su cuarto juego en las mayores.
Matos está aprovechando la oportunidad para ingresar a la alineación de los Giants mientras Mitch Haniger se recupera de una cirugía en la muñeca derecha.