Cerca de 7.000 colombianos que trabajan en las minas de oro del Parque Nacional Cerro Yapacana de Venezuela corren el riesgo de ser deportados en el «mayor éxodo de los últimos tiempos», advirtió la Defensoría del Pueblo de Colombia.
En un comunicado, el Defensor del Pueblo, Carlos Camargo, instó a las agencias gubernamentales a crear un “plan de emergencia para la posible deportación o eventual retorno de aproximadamente 7.000 colombianos desde Venezuela”.
Los posibles refugiados podrían ser colombianos que trabajan en las minas de oro Yapacana en el estado de Amazonas, donde existen diversos grupos armados, “directa o indirectamente en su trabajo, lo que los expone a amenazas y violaciones de derechos fundamentales”, dice el comunicado.
Los mineros colombianos y sus familias también han sido expuestos en las últimas semanas a los operativos de las fuerzas de seguridad venezolanas contra la minería ilegal.
En ese sentido, la Defensoría del Pueblo emitió una alerta temprana en la que alertó “no solo sobre los peligros para la población civil, sino también sobre los peligros que podrían derivar en desalojos masivos relacionados con posibles conflictos armados en las zonas mineras de Amazonas”. colombianos que dependen de esta actividad en la zona sur de la Orinoquia, Venezuela”, dijo el defensor.
La información agregó que los principales centros de recepción de los 7.000 colombianos estarán en las localidades fronterizas venezolanas de Cachahual, Puerto Colombia y San Felipe, pero estas “no pueden responder a una migración masiva, no tienen la capacidad suficiente”.
De ser así, advirtió la dependencia, enfrentaremos una crisis humanitaria, pues sus habitantes también se encuentran en un estado de vulnerabilidad socioeconómica.
“Hacemos un llamado al Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia para que aplique los mecanismos necesarios para garantizar el debido proceso y el derecho a la defensa de nuestros compatriotas que puedan ser detenidos durante el desarrollo de las operaciones en Yapacana”, dijo Camargo.
Asimismo, solicitó al Ministerio de Relaciones Exteriores “establecer mecanismos de cooperación que eliminen posibles violaciones a los derechos de la población en la circulación de personas en la frontera entre el Departamento de Guinea y el estado venezolano de Amazonas” y pidió la apertura de consulados San Fernando Atabapo y Puerto Ayacucho.
Agencias