La agencia de la ONU para los refugiados de Palestina (UNRWA) advirtió este jueves que se enfrenta a una «enorme crisis financiera» que la dejará sin fondos a partir de septiembre de este año, para lo que necesita al menos 150 millones de dólares para completar su presupuesto para el resto de el año.
Así lo informó en rueda de prensa el comisionado de la agencia, Philippe Lazzarini, quien afirmó que “según nuestras previsiones, a partir de septiembre no tendremos fondos ni dinero disponible para mantener en funcionamiento nuestras escuelas, centros de salud y otros servicios esenciales”.
UNRWA, que depende de las contribuciones de los donantes, brinda educación a más de medio millón de estudiantes y atención médica a casi dos millones de refugiados en Gaza y Cisjordania y en países vecinos como Siria, Jordania y Líbano.
Este año, la agencia enfrenta una situación aún más crítica debido a los recortes de ayuda decididos por algunos países.
De los 150 millones de dólares que necesitamos para terminar este 2023, necesitamos otros 50 millones de dólares para no empezar el 2024 con déficit; otros 75 millones para evitar que se paralice la ayuda alimentaria en Gaza y unos 30 millones para su programa de ayuda económica a refugiados en Siria y Líbano.
reforma de financiación
De igual manera, Lazzarini impulsó una reforma en la forma de financiar sus actividades a más largo plazo, debido a las permanentes dificultades económicas que amenazan su obra.
El funcionario lamentó que sin las donaciones necesarias no podrían brindar los servicios “y con esto las vidas de los refugiados palestinos penderán de un hilo y millones de personas en la región y más allá se verán afectadas”.
Con la intensificación de los ataques de Israel en la Franja de Gaza y los territorios ocupados, miles de palestinos viven en campos de refugiados; por lo que su salud y educación se verán cada vez más afectadas, especialmente las de la niñez.