Carlos se encontraba en la avenida Bolívar cuando observó un Ford Galaxie negro en Maracay que apareció de la nada. Lo vi muy de cerca por el espejo retrovisor, mientras veía a Carolina, su novia, que estaba recostada en el asiento del pasajero, completamente dormida…
Eran las tres de la mañana cuando decidió dejar el auto, pero redujo la velocidad mientras apagaba las luces. Era enero de 2000, les pareció que el coche no estaba lejos de ellos.
Una vez, cuando decidió acelerar por la solitaria avenida, vio como el coche se acercaba misteriosamente de nuevo. «Sería mejor que me quedara en casa, ¿ahora qué quiere?»
El auto subió hasta arriba y cambió de semáforo en la avenida, a pesar de los semáforos en la avenida, no se detuvo ante nadie. Esperó a ver si venía otro auto pero nada, el parabrisas del Galaxie estaba completamente oscuro.
Galaxia Negra en Maracay
Aceleró a fondo cuando Carolina despertó… ¿qué está sucediendo?… ¡Guau, este auto nos sigue! acelerado Pero fue entonces cuando el motor del misterioso coche rugió, pidiendo más gasolina y acercándose al parachoques…
Si vas a pasar, pasa, ¡pero deja de molestarme! pero el misterioso conductor del Galaxy acelera el coche. Llegando a la fiala de San Jacinto pasó el misterioso auto, el cual pasó al mismo tiempo que una brisa fría recorría el lugar…
¿Qué fue eso?Carlo y Carolina vieron que el auto ni siquiera tenía matrícula… años después se enteraron de esa leyenda. Esto es poco conocido en la ciudad jardín por la noche.
Mientras que otros dicen que esto es sólo una leyenda, porque la gente no sale de noche; y que nada de eso existe. «Además del Galaxie, hablan de un Fairlane, pero nadie ha visto nada parecido», dice uno de los taxistas nocturnos de Maracay.
Leer más información en nuestro portal y consulta nuestros planes publicitarios