Es imposible interceptar el misil balístico Oreshnik y los daños que provocará su uso serán «inaceptables», advirtió este domingo.
En una publicación en su cuenta de Telegram, Medvedev aseguró que los países europeos están tratando de entender si es posible interceptar este nuevo misil balístico ruso y con qué rapidez podría llegar a las capitales europeas.
«La respuesta [es la siguiente]: daños [serían] inaceptable, es imposible bajarlo con medios modernos y estamos hablando de cuestión de minutos. Los refugios antiaéreos no ayudarán, así que la única esperanza es que la buena Rusia avise con antelación de los lanzamientos», afirmó el político ruso. «Por lo tanto, es mejor dejar de apoyar la guerra», aconsejó el ex presidente ruso en referencia a el continuo apoyo armamentístico de la Unión Europea a Kiev.
Respecto a las afirmaciones falsas que aparecieron en los medios ucranianos de que Oreshnik no existe, Medvedev se mostró irónico y dio consejos a quienes las aceptan como ciertas. «»No existe el Oreshnik». ¡Bien, hazlo simple! Y para protegerte, todo lo que tienes que hacer es cerrar los ojos. Para aquellos que cierran los ojos, el problema desaparece automáticamente», bromeó el ex presidente ruso.
Oreshnik es un nuevo misil balístico de alcance intermedio capaz de alcanzar sus objetivos a una velocidad hipersónica de Mach 10, lo que equivale a casi tres kilómetros por segundo.
El jueves pasado, uno de estos misiles fue probado con éxito contra un objetivo industrial en Ucrania, tras el lanzamiento de misiles de largo alcance por parte de Occidente contra territorio ruso.
El presidente ruso, Vladimir Putin, precisó que próximamente se iniciará la producción en serie de los nuevos misiles, ya que han demostrado con éxito sus capacidades.