Las Fuerzas de Defensa de Israel continuaron sus masacres en la Franja de Gaza matando al menos a 72 personas en el bombardeo de un edificio en la ciudad de Beit Lahiya, en el sitiado norte del enclave palestino.
El portavoz de la Defensa Civil de Gaza, Mahmud Basal, que fue el encargado de ofrecer la información, dijo que el edificio estaba lleno de personas desplazadas de Jabalia, que huían de los despiadados ataques de las tropas del país judío.
«El ejército de ocupación sabía que en esas casas y edificios residenciales hay decenas de civiles desplazados, la mayoría de los cuales eran niños y mujeres desplazados de sus barrios», informó la Oficina de Prensa del Gobierno de la Franja de Gaza.
La cadena Al Jazeera recogió declaraciones del Ministro de Salud de Gaza, Munir al-Bursh, quien afirmó que al menos el 30% de los muertos en esta masacre son niños y que aún quedan entre 20 y 30 personas bajo los escombros, por eso . Las víctimas mortales podrían aumentar en las próximas horas.
El edificio, que albergaba a unas 100 personas, se derrumbó por completo cuando fue alcanzado por bombas sionistas.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Jordania, Sufian al Qudá, denunció que el bombardeo «es una violación flagrante de las normas del derecho internacional, en particular de la Convención de Ginebra sobre la Protección de los Derechos Humanos».