Los Jefes de Gobierno de la Comunidad del Caribe (CARICOM) acordaron este miércoles un plan para prohibir las armas de asalto, la mayoría de las cuales provienen de Estados Unidos (EE.UU.).
Según TeleSur, el comunicado final de la reunión expresa la «seria preocupación» de los 15 países integrantes del bloque por el aumento de la exportación ilegal de equipos desde Estados Unidos, lo que «constituye una amenaza directa a nuestra democracia» ( . ..) “causando muertes, invalidez y comprometiendo la seguridad de nuestros ciudadanos”.
Por ello, pidieron a Estados Unidos unir esfuerzos con el Caribe “en nuestra Guerra contra las Armas y adoptar y tomar medidas urgentes”.
Esto, luego de detectar que el 98,6% de las armas de fuego que se han recuperado -al menos en Bahamas- son producidas en Estados Unidos, mientras que en Haití es el 87,7% y en Jamaica el 67%.
La declaración lamenta la parte desproporcionada de los presupuestos que los gobiernos «se ven obligados a asignar a medidas para abordar el crimen, la violencia y la seguridad nacional, así como la salud mental y otros desafíos relacionados».
El documento finalmente expone el compromiso de los países miembros de «utilizar todos los recursos humanos, financieros y de otra índole» para librar a la Región «del flagelo de las armas ilícitas».