En las últimas horas se ha registrado un nuevo giro en el caso Liam Payne. La Fiscalía argentina ha imputado a tres personas por la muerte del exintegrante del grupo «One Direction».
«Se han constatado conductas ilícitas y tres personas han sido imputadas en el marco de la investigación por la muerte del músico británico Liam James Payne, quien cayó desde un balcón de un hotel del barrio porteño de Palermo el 16 de octubre. La Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N° 14 informó que se cometieron “delitos de suministro y facilitación de drogas, que resultaron en muerte por abandono de personas”.
También señaló que la acusación se produjo luego de una extensa investigación, testimonio y análisis de más de 800 horas de imágenes de cámaras en el hotel y en la vía pública. Así como el contenido de los celulares de Payne y de varios testigos, así como pruebas tanatológicas y de laboratorio.
¿QUIÉN ES ACUSADO?
Según conoció Infobae, el primer imputado será Rogelio Luis Nores, de 36 años. Se dedicaba a servicios de consultoría, dirección y gestión empresarial. Según las autoridades, fue el «escolta diario del artista» mientras estuvo en Buenos Aires.
Nores, que no es argentino, fue imputado por los delitos de abandono de persona con resultado de muerte y suministro y facilitación de parafernalia de drogas.
En tanto, el segundo sospechoso será Ezequiel David Pereira, de 21 años. Trabajó como empleado en el hotel CasaSur donde se hospedaba Payne.
«Debe responder por dos entregas comprobadas de cocaína a Liam Payne (mientras estaba en casa)», dijo la fiscalía.
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A su vez, el tercer imputado será identificado como Brian Nahuel Paiz, de 24 años. Este es un proveedor de drogas.
«Se le imputan dos suministros más que fueron claramente probados el 14 de octubre en dos momentos diferentes», dijo la fiscalía.
DROGAS, ALCOHOL Y DROGAS
Según pruebas de toxicología, se determinó que el cantante había «consumido alcohol, cocaína y antidepresivos, lo que sugiere un uso intensivo de drogas en las horas previas a su muerte».
Además, determinaron que todas las lesiones de Liam Payne eran «consistentes con lesiones resultantes de una caída desde una altura y excluyen cualquier autolesión y/o intervención física por parte de terceros».
De igual forma, reiteraron que el músico no adoptó una postura refleja para protegerse durante la caída, por lo que creen que «pudo haber caído en una inconsciencia semi o total». En este sentido, se excluye la posibilidad de un «acto consciente o voluntario», porque «no sabía ni podía entender lo que hacía en la situación en la que se encontraba».
«Además de la solidez de las pruebas obtenidas hasta el momento (visuales, registrales, médicas, científicas, documentales, telefónicas, testimoniales, etc.), la investigación debe continuar porque, entre otras diligencias, se produjo la apertura del netbook personal de la víctima -dañado – y otros dispositivos fueron incautados durante la investigación», – se menciona en la información.