A 45 minutos del centro del municipio de Boconó, estado Trujillo, en el sector La Horchila de la parroquia Rafael Rangel, se encuentra la finca de San Pedro, donde se cultivan hongos desde hace 18 años y con calidad de exportación.
Allí, la empresa Agroinversiones Gran País produce el hongo blanco tipo París y la variedad marrón Portobello, que son las especies de mayor consumo en Venezuela.
Tiene una capacidad instalada de 36.000 sacos, manteniendo actualmente un activo estimado del 35%. Además, su producción se estima en torno a los 20.000 kilos mensuales y su ámbito de distribución cubre el 60% del territorio nacional.
Estos hongos comestibles se cosechan en Boconó desde 2005, cuando un grupo de trabajadores aceptó el desafío del afamado ganadero José Antonio Gutiérrez Piña de crear una sucursal de Hongos San Pedro, que nació en el estado Lara.
El gerente general de Agroinversiones Gran País, César Vetancourt, dijo que desde un inicio la empresa ha estado del lado de los agricultores de Bocones, quienes traían al lugar parte de su producción de hongos para su comercialización en varios estados del país.
“Los agricultores de la zona migraron de las actividades cafetaleras al mundo de los hongos gracias a Champiñones Boconó, proyecto que por diversas causas se desintegró y San Pedro pudo salvar, llegando a 42 productores independientes, quienes recibieron el material de la plantación para su cultivo. .y la cosecha, luego la traían a la empresa de San Pedro. Así ha funcionado el esquema de producción durante muchos años, generando una mejor calidad de vida para los productores y sus familias”, recordó.
Agregó que San Pedro se consolidó como uno de los tres principales productores de champiñones en Venezuela, pero la situación económica del país provocó una merma en la producción, reduciendo el número de productores a más de la mitad.
Actualmente existen 12 productores de Bocone que se dedican al cultivo y comercialización de hongos junto con Agroinversiones Gran País, que busca fortalecer el sector champiñón y su alcance de comercialización con una red de distribuidores en diferentes regiones del país.
culto
En la finca de San Pedro se realiza un proceso de siembra, producción y comercialización de hongos de manera integral y en ciclo completo.
Las bolsas de compost se reciben semanalmente desde el centro de compostaje, lo que garantiza que haya una producción permanente. Este es un cultivo que dura dos meses, desde que se recibe la bolsa de compost hasta que se cosecha el producto para la venta.
“La semilla (micelio) se inocula en un laboratorio especializado, la composta se pasteuriza y finalmente se cultiva en la planta de producción en salas debidamente acondicionadas para ello, con los niveles de temperatura y dióxido de carbono (Co2) necesarios en las distintas fases de la proceso. proceso. cultivo», explicó Vetancourt.
La siembra se realiza en bolsas plásticas de 15 kilogramos con material vegetal, semilla inoculada, compactación de compost, rascado, cobertura con tierra enriquecida nutricionalmente, fructificación y cosecha.
Se cultiva en cobertizos o estancias cerradas, frías y oscuras, ya que la seta, por sus propias características, no necesita luz natural para su desarrollo.
“La recolección de hongos es una actividad que iniciamos con el primer rayo de sol, pero que se puede extender hasta altas horas de la noche cuando la producción lo requiere, ya que es un cultivo que no puede esperar al día siguiente porque si se deteriora rápidamente”. enfatizó.
Además, indica que la calidad de las setas está en sus tallos, que deben ser rectos, de aspecto brillante y de corte limpio. También está en la limpieza y la ausencia de otras decoloraciones. Las agallas visibles y abiertas y la ausencia de un tronco se consideran factores negativos.
Destacó que el hongo es rico en magnesio, selenio, vitaminas C y D, calcio, proteína y cero colesterol, lo que lo convierte en un ingrediente efectivo en dietas especiales para prevenir el cáncer de útero y próstata.
Datos
En Venezuela, el cultivo de hongos se remonta a fines de la década de 1970, cuando se fundó la empresa Hongos San Pedro en el estado Lara.
En Saint-Pierre y Gran París, el uso de agroquímicos es mínimo.
En Trujillo el consumo de hongos es muy incipiente, debido a la gastronomía muy específica de los trujillanos.