La Asamblea Nacional (AN) aprobó ayer martes un acuerdo en el que se aconseja al Ejecutivo venezolano romper relaciones con España.
Los diputados decidieron “rechazar categóricamente la nefasta resolución impulsada por la derecha fascista del Congreso de los Diputados de España, y también instarlos a respetar la decisión del pueblo venezolano que eligió a Nicolás Maduro como reelegido presidente de la República”
Y votaron a favor: «Insto al Ejecutivo Nacional a evaluar en tiempo perentorio, la ruptura de relaciones diplomáticas y comerciales con el Reino de España. Sobre la acción recíproca por la grosera e injerencista propuesta adoptada en el Congreso de los Diputados de España contra las instituciones venezolanas.
El presidente del Parlamento, Jorge Rodríguez, enfatizó que Venezuela tiene «una marca genética» de respeto a la soberanía. En su opinión, un sector de la política española no parece perdonar que hace 200 años «los derrotamos y los dejamos huir como ratones».
Criticó que España decidiera reconocer a «un señor cobarde y tembloroso», en referencia a Edmundo González Urrutia.
Rodríguez, en su discurso, propuso pedir a España la abolición de la monarquía «por ser una institución absurda, por ser una institución ridícula».
El dirigente chavista argumentó que los dos españoles detenidos en Venezuela no hacían turismo: «Es muy raro encontrar dos personas con experiencia en asesinatos que hagan turismo en Atabapo. En los números de teléfono de estas personas, de nacionalidad española, no constaba referencia a una agencia de viajes o una agencia de viajes, pero había fotografías de los objetivos que iban a asesinar» y «de los depósitos que recibirían los asesinatos que se les encomendaban».
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