El presidente de Colombia, Gustavo Petro, insiste en la existencia de un supuesto plan para devolverlo en tres meses apenas unos días después de convocar a una movilización popular contra un «golpe de Estado» sobre el que ya se ha pronunciado en varias ocasiones. , aunque volvió a insistir en poco tiempo.
«La orden ya está dada: en los próximos tres meses asesinar al presidente o enviarlo de regreso», dijo Petro, tras insistir en responder con una «revolución», según informó la emisora colombiana W Radio.
Por otro lado, acusó a varios medios de manipular sus palabras «para que digan lo contrario de lo que dice» y también de «callar» como forma de satisfacer a la «gran potencia económica».
De igual forma, criticó la decisión del Consejo de Estado colombiano de «despojarlo de su competencia» para permitir la «ilegítima» investigación sobre el presunto financiamiento ilegal de su campaña presidencial.
«Quieren instalar en la mente de los colombianos la idea de que el presidente violó la ley, pero el presidente no violó la ley», agregó. Petro también aseguró que este supuesto plan tiene como objetivo designar como presidente al actual presidente del Senado, Efraín Cepeda.
Movilizaciones populares
Gustavo Peter convocó el domingo a la movilización popular contra lo que consideró un «golpe de Estado» de sus rivales políticos y de la «oligarquía». A quienes acusa de ir en contra del «cambio» y del «voto popular», un supuesto plan contra el que no es la primera vez que se pronuncia.
«La oligarquía colombiana que no se cansa de ordeñar al país y convertirlo en uno de los más desiguales y violentos del mundo, ha decidido acabar con la pequeña democracia establecida en la constitución de 1991, y romper sus reglas porque no pueden tener un presidente. del lado del pueblo y no del lado de sus mafias y maniobras asesinas.
«Un golpe de Estado contra el cambio en Colombia y el voto del pueblo lo preparan los derrotados en 2022.» Así lo indicó Petro en su cuenta de la red social X.
En este sentido, aseguró que sus «enemigos políticos» en el Consejo Electoral intentarán destituirlo «sin haber cometido ningún delito», algo que supondría «reírse» de los resultados de las elecciones de 2022.