Según el diputado de la AN, Juan Eduardo Romero, las acciones paramilitares que se desarrollan en territorio zuliano han generado una ola de discusión sobre la Ley Antifascismo.
“En el caso del Zulia, la presencia de elementos del paramilitarismo y el financiamiento de organizaciones parapolíticas le da mayor significado a la discusión de esta Ley, porque esta región siempre fue parte de los planes del enemigo, todos infructuosos, para convertirnos en especie como especie. cabeza de puente, explica Romero, en un intento de desestabilizar el proyecto político bolivariano.
Debate
A través de las asambleas se debatió el instrumento jurídico de los tres capítulos, en las parroquias maracaiberas de Caracciolo Parra Pérez, Coquivacoa, Olegario Villalobos, Raúl Leoni, Bolívar, Santa Lucía y en San Isidro, además del municipio de Jesús Enrique Lossada, Miranda, Guajira, Jesús María Semprúm y Mara.
Militantes y personas organizadas han llevado a cabo diálogos destinados a detener la violencia y la oposición a través de la paz.
“La discusión de esta ley es importante por el fenómeno del posfascismo que estamos viviendo, y quisiera definirla así por su complejidad, que es mucho más violenta que el fascismo neonazi, porque volvemos a un movimiento. reconoció la violencia, la xenofobia, el misógino y el antisemitismo y el posfascismo no reconoció nada de eso y se le presentó un discurso más suave a través de los medios de comunicación y redes sociales, pero sus acciones son mucho más violentas, porque sus mensajes atacan el aspecto cognitivo. donde surgen reacciones emocionales. Al destruir esto, se destruye cualquier prevención de violencia excesiva”, señaló.