Roberto Clemente, considerado uno de los más grandes jardineros derechos en la historia de las Grandes Ligas y también uno de los jugadores latinoamericanos más brillantes que jamás haya jugado en las Grandes Ligas, celebró el pasado domingo su cumpleaños número 90.
Clemente, conocida como «Carolina Comet» nació el 18 de agosto de 1934 en Carolina, Puerto Rico. Debutó en las mayores el 17 de abril de 1955 con los Piratas de Pittsburgh, su equipo de toda la vida con el que jugó 18 temporadas.
En 1966, fue nombrado Jugador Más Valioso de la Liga Nacional, bateando .317 con 29 jonrones y 119 carreras impulsadas. Ganó dos Series Mundiales (1960 y 1971) y fue el MVP del Clásico de octubre de 1971.
El puertorriqueño fue un jugador extraordinario. También se caracterizó por ayudar a los más desfavorecidos y marginados, junto con su amor a la familia, valores por los que hoy es más recordado.
La primera superestrella latinoamericana en las Grandes Ligas, murió el 31 de diciembre de 1972 en un accidente aéreo mientras se dirigía a llevar ayuda a las víctimas de un terremoto en Nicaragua. Clemente, de 38 años, transportaba suministros cuando el avión en el que viajaban él y otras tres personas se estrelló en el mar frente a su Puerto Rico natal.
Un jugador completo
Clemente, uno de los jugadores más completos de todos los tiempos, tuvo un promedio de bateo de .317 en su carrera. Como si eso no fuera suficiente, ganó 12 Guantes de Oro por su destreza defensiva. El patrullero acudió 15 veces al Juego de Estrellas. El puertorriqueño ingresó al Salón de la Fama en 1973.
Tres meses antes de su trágica muerte en 1972, Clemente se convirtió en el undécimo jugador en la historia de las Grandes Ligas en lograr al menos tres mil hits. Terminó con exactamente tres mil aciertos.
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Bateó más de .300 en 13 temporadas. Se estableció como el máximo bateador de la Liga Nacional en cuatro ocasiones. Las habilidades defensivas de Roberto Clemente como jardinero derecho, incluido su poderoso brazo, fueron excepcionales. Su récord de 266 despliegues sigue en pie.
ven a venezuela
Roberto Clemente llegó por primera vez a nuestro país en 1955 con Cangrejeros de Santurce para participar en la Serie del Caribe disputada en el estadio Universitario. La selección puertorriqueña se llevó el título al lograr un récord de 5-1.
«Carolina Cometa» también estuvo en nuestro país con los Piratas de Pittsburgh en marzo de 1972 para disputar una serie de tres partidos ante los Rojos de Cincinnati en Caracas y Maracaibo. Clemente tenía como compañero a «Vitico» Davalillo. Pete Rose y David Concepción estaban en los rojos.