Un nuevo ataque mortal ha golpeado a Gaza. El ejército israelí lanzó cohetes este sábado 17 de agosto contra Zawayda, en el centro del enclave, matando a 17 palestinos e hiriendo a decenas más, según las autoridades médicas locales.
La mayoría de las víctimas pertenecían a la misma familia, incluidos ocho niños y cuatro mujeres. El ejército israelí dijo que estaba investigando el incidente, algo que no suele hacer con ataques individuales.
«Estaban durmiendo en sus camas, bebés y niños, cuando tres misiles alcanzaron su casa», dijo Abu Ahmed Hassan, un vecino. Y añadió. «Aquí no hay actividad militar». Según trascendió, la casa afectada pertenece a un comerciante y que allí se refugiaban más de 40 civiles en el momento del ataque.
Por su parte, la agencia de prensa estadounidense AP pudo confirmar que entre los muertos se encontraba un mayorista identificado como Sami Jawad al-Ejlah, que coordinaba con el ejército israelí el transporte de carne y pescado a Gaza.
El ataque se produce cuando Israel emitió nuevas órdenes de «evacuación» forzada. De hecho, incluso este sábado, el portavoz militar de Israel emitió instrucciones en árabe para que los residentes de algunas zonas del centro de Gaza, incluido el distrito de Maghazi, cerca de Zawayda, evacuaran a lo que llamaron «una zona humanitaria designada». La justificación: el ejército israelí ha indicado que operará en esas zonas en respuesta al lanzamiento de cohetes por parte de militantes palestinos. Agencias
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