un manual de exorcismos de 1783, que nadie se atreve a tocar simplemente por superstición; La primera Biblia en español, que data de 1569 y acuñada en la imprenta de Gutenberg; el libro más pequeño del mundo con el Padrenuestro en siete idiomas que sólo se puede leer con lupa; Una piedra cuneiforme de casi 5.000 años de antigüedad donada por Arturo Uslar Pietri; El primer libro impreso en Venezuela desde 1810 con imprenta traída por Miranda; Segunda edición de Don Quijote en 1617; Estas son sólo algunas de las maravillas de los incunables que la enorme infraestructura del Foro Libertador, al final de la Avenida Panteón, al norte de la Iglesia Altagracia, protege entre sus escondites espectrales.
Fundada en un antiguo convento de San Francisco, y durante 191 años desde su primera ubicación, la Biblioteca Nacional ha tenido que arrastrar desde sus sótanos sus textos incunables y ectoplasmas como fardos envueltos en celofán, resistiendo las batallas de la modernidad hacia el laberinto tecnológico llamado La Internet.
Se dice que su historia está relacionada con las ideas de libertad, identidad y soberanía del país.
En 1810, un folleto en blanco perteneciente al prócer Juan Germán Roscio, uno de los propagandistas de la independencia, comenzó a distribuirse en Caracas, donde la idea de crear una biblioteca era promover las ideas que éste había puesto en su mira. Se declaró la Ilustración. Simón Bolívar ordenó la creación de una biblioteca pública en Caracas el 4 de junio de 1814, iniciativa que sobrevivió a las adversidades de la Guerra de Independencia. El 13 de julio de 1833, durante el gobierno de José Antonio Páez, finalmente se promulgó el decreto por el que se creaba la Biblioteca Nacional. Por lo tanto, es la institución cultural más antigua del país, y hoy tiene influencia nacional bajo el nombre de Biblioteca Nacional de Venezuela e Instituto Autónomo de Servicios Bibliotecarios. Es, en definitiva, el depósito de la memoria más extensa y multidocumental del país.
Un caleidoscopio documental
- 80.000 metros cuadrados es el tamaño total de la enorme infraestructura del Foro Libertador.
- Entre sus innumerables salas se incluyen Catálogo Automatizado, Dirección y Referencia, Centro de Información y Documentos de Biblioteca, Fondo Bibliográfico General, Fondo de Hemeroteca, Fondo de Publicaciones Oficiales, Fondo de Documental Antiguo (Libros Raros), Fondo Arcaico, Fondo Sonoro y Cine (Archivo Audiovisual) y fondo de obras planas.
- El proyecto «Memorias del Tiempo» es una iniciativa que reúne las voces de los héroes actuales de la historia viva, un archivo único de imágenes y palabras basado en los testimonios de las figuras públicas más influyentes.