El cordón sanitario y la unidad funcionaron, de modo que la alianza de izquierda del Nuevo Frente Popular (NFP) ganó las elecciones legislativas francesas. A pesar de la victoria de la primera vuelta, la extrema derecha de Marine Le Pen acabó finalmente como tercera fuerza. Por ahora, la izquierda quiere aplicar su programa de gobierno.
Tras la victoria, el jefe del NFP, Jean-Luc Mélenchon, pidió este domingo al presidente, Emmanuel Macron, que confiara en él para formar gobierno. Macron «tiene el deber de convocar al Nuevo Frente Popular a gobernar», afirmó. Según Mélenchon, el presidente «debe ceder y admitir esta derrota sin intentar evitarla de ningún modo».
La izquierda francesa designará esta semana un candidato a primer ministro que será designado y gobernará con su propio programa y no en coalición con la mayoría saliente del presidente Macron. Lo dice no sólo Mélenchon, sino también los socialistas.
«Esta semana necesitamos poder preparar una candidatura», subrayó este lunes en France Info el primer secretario del Partido Socialista, Olivier Faure, quien insistió en que Macron debe reconocer que «fue derrotado» en las elecciones legislativas de diciembre. 30 de junio y 7 de julio. Faure no quiso comentar quién, salvo excluir a Mélenchon. Dijo que la persona elegida debería «poder dialogar con el mundo exterior», porque la mayoría relativa del PFN debería «ampliarse».
Las propuestas de la izquierda francesa
Durante la campaña, los cuatro partidos del NFP acordaron formar un programa común de 150 medidas. Destaca la subida del salario mínimo hasta los 1.600 euros netos y el incremento del salario de los funcionarios en un 10%. En relación con esto, quieren ajustar todos los salarios según una escala de indexación directamente vinculada a la inflación y congelar los precios de las necesidades básicas, incluidos los alimentos, la energía y el gas.
También quieren reducir la pensión a 60 años. La reforma de las pensiones impulsada por Macron elevó esa edad de 62 a 64 años, la fecha límite para alcanzar esta cifra es el año 2030. Esta reforma entró en vigor en septiembre de 2023 y fue aprobada sin mayoría en la cámara, gracias al artículo 49.3, que confiere esta facultad al Presidente de la República.
Proponen un sistema que permita la regularización de migrantes. Están comprometidos a crear una agencia de rescate marítimo y terrestre para inmigrantes indocumentados y facilitar las solicitudes de visa. Quieren un estatus para los «refugiados climáticos» y que la cobertura sanitaria universal llegue también a los refugiados. Piden la reapertura del Pacto Europeo sobre Migración (reforma del sistema de asilo de la UE) antes de que las normas entren en vigor en 2026.
Los partidos NFP han mostrado su rechazo a las normas de gasto de la Unión Europea. En cuanto a la guerra en Ucrania, proponen seguir enviando ayuda militar sin que Francia intervenga directamente en el conflicto. Pero esta izquierda francesa unida no propone la salida de Francia de la OTAN. De hecho, Mélenchon lo propuso en el pasado, pero hoy, recuerda France 24, mantiene una posición ambigua al respecto. Proponen el reconocimiento del Estado de Palestina por parte de Francia y un embargo de armas a Israel.