El presidente de Rusia, Vladimir Putin, depositó flores en la Tumba del Soldado Desconocido, junto a la Muralla del Kremlin, como homenaje a los caídos en la Gran Guerra Patria. En cuanto al Día de la Memoria y el Dolor, el Jefe de Estado guardó un minuto de silencio frente al monumento que recuerda, con una llama eterna, a los mártires del conflicto ocurrido entre 1941 y 1945.
Asimismo, el Ministro de Defensa ruso, Andrei Belousov, colocó flores a los pies del monumento histórico, ubicado en los Jardines de Alejandro, en el centro de Moscú (capital). Los veteranos de guerra y los graduados de las academias militares también colocaron claveles rojos en los monolitos de las ciudades soviéticas que tienen el título honorífico de Ciudad Héroe.
Antes de la ceremonia, el programa de conmemoración comienza desde primeras horas de la mañana. En alegoría a la cantidad de días que duró el conflicto soviético-alemán, un total de 1.418 velas fueron encendidas en la Catedral de la Resurrección de Cristo, el principal templo de las Fuerzas Armadas rusas, ubicada en el Parque Patriota.
A pesar del pacto de no agresión firmado en agosto de 1939, la Alemania nazi atacó la Unión Soviética el 22 de junio de 1941. Las estadísticas oficiales indican que, debido al enclave, más de 27 millones de soviéticos perdieron la vida en la guerra de invasión de Hitler.
Fuente: TeleSur
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