Anthony Edwards se recuperó de un comienzo lento y los Timberwolves se recuperaron de un déficit de 20 puntos en la segunda mitad para eliminar a los actuales campeones de la NBA, Denver Nuggets, 98-90 en una obra maestra del séptimo juego de Minnesota el domingo por la noche.
Los Timberwolves se sobrepusieron a un déficit de 15 puntos, la mayor remontada en el séptimo juego en la historia de los playoffs de la NBA, detrás de Edwards, que anotó sólo cuatro puntos, ningún rebote y tres asistencias en la mitad, pero terminó con 16 puntos, ocho rebotes y siete asistencias.
«Fue difícil, hombre, porque no pude encontrar mi ritmo esta noche», dijo Edwards. «Así que tuve que confiar en mis compañeros de equipo. Sólo tuve que hacer las jugadas correctas el resto del juego. Lo hice y mis compañeros de equipo hicieron tiros. Un gran reconocimiento a esos muchachos».
Cuando Minnesota tomó el control tarde, Edwards negó repetidamente a Jamal Murray, quien anotó 24 puntos en el medio tiempo y terminó con 35.
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«Hay más maneras de ganar el juego de baloncesto cuando simplemente no eres un jugador ofensivo», dijo Edwards. “No soy unidimensional. No soy sólo un tipo que puede anotar. Soy un tipo que, sea quien sea su mejor guardia, puedo encerrarlo. Siento que hice eso con Jamal en el último cuarto, en el tercer cuarto y en el último cuarto, y eso es lo que cambió el juego».
Los Wolves, que obtuvieron 23 puntos de Karl-Anthony Towns y Jaden McDaniels, avanzaron a la final de la Conferencia Oeste por primera vez en exactamente 20 años. Se enfrentarán a los Dallas Mavericks, a partir del miércoles por la noche en el Target Center.
«Se siente bien», dijo el centro de los Wolves, Rudy Gobert. «Vencer a un equipo como este, un equipo increíble, un equipo campeón, con el mejor jugador del mundo, se siente bien».
Los Nuggets se convirtieron en el quinto campeón defensor consecutivo que no logra llegar a las finales de conferencia. Detrás de los 24 puntos de Jamal Murray en la primera mitad, los Nuggets se fueron al medio tiempo con una ventaja de 53-38 y un triple de Murray con 10:50 restantes en el tercer cuarto empujó la ventaja de Denver a 58-38.
Los Wolves confiaron en su defensa, la más fuerte de la NBA, para volver al juego y terminaron el cuarto con un parcial de 28-9 para ponerse 67-66 al inicio del último cuarto.
AP
