Septiembre es el noveno mes del año. Calendario Gregoriano.
Es un mes lleno de evientos trascendentales en la historiaalgunos positivos y otros negativos.
Además, fue el mes en el que crecieron las personas más inteligentes e influyentes en su campo, nacieron grandes escritores y filósofos.
A En septiembre le dedicaron poemas, poemas y canciones.
Leyendo la semana pasada, me encontré con el poema del 8 de septiembre de Pablo Neruda.
Y él dice:
«8 de septiembre»
Hoy, este día fue un vaso lleno,
hoy, hoy hubo una ola enorme,
hoy era toda la tierra.
Hoy el mar tempestuoso nos llevó tan alto en su beso que temblamos al relámpago, y desatados y desatados descendimos para sumergirnos en el agua. Y nuestro cuerpo se expandió y creció hasta eEl borde del mundo y rodaron y se convirtieron en una gota de cera o en un meteoro.
La puerta se abrió entre tú y yo y todavía había una persona sin rostro esperándonos.
También hay un hermoso poema sobre:
«La felicidad del nacimiento».
¡Y hoy, en vísperas de mi cumpleaños, lo haré mío!
– Qué suerte tuve de nacer un 8 de septiembre…
Y sí, estoy emocionado…
y sí, lo hago público y sí, lo celebro. Además, porque nací y renací… #sobrevivientecovid.
«Una extraña manera de volver a la vida»
Este es el título del artículo que escribí al respecto y hoy quiero agradecer nuevamente. Impulso y por la amable atención de la Sra. Gisela Carmona y la Sra.
Jessica Oshiro por publicar este artículo el 28 de julio de 2021 en Elimpulso.com
Me encanta un hermoso y reflexivo poema del gran Alberto Cortez llamado:
«Qué suerte tuve de nacer».
– Qué suerte tengo de haber nacido, de haberle dado la mano a mi amigo y haber sido testigo del milagro cada mañana.
Que suerte tengo de haber nacido, de poder hacer equilibrio, de medir el fracaso y la esperanza con la gloria y el miedo a caer.
Qué suerte tengo de haber venido al mundo, de darme cuenta de que aunque las opiniones de los honestos y los corruptos sean diferentes, son iguales dueños del mundo.
Nací de tal manera que me quedaba en silencio cuando alguien que sabía hablaba, aprendí a escuchar, lo principal es que tengas la intención de aprender.
tengo suerte de nacer
Y lo digo sin una falsa victoria, una victoria completa, formada por sí misma, en el ser y en el no ser.
Qué suerte tuve de nacer, de cantarle a la gente, a las rosas y a los perros, a cualquier cosa que pudiera generar amor y cariño.
Que suerte tuve de nacer, de ser río en lugar de laguna,
ser la lluvia en lugar de ver la lluvia.
Por mucho que tenga suerte, nací comiendo manzanas a conciencia, sin miedo a los antepasados.
Incluso hasta la venganza final de Lucifer.
Pero lo sé, lo sé… algún día yo también moriré.
Ahora si vivo feliz para siempre
Dios sabe lo que pensaré cuando muera.
No sé cuál será mi saldo en el dolor,
Nunca he estado en tal trance.
Pero lo sé, lo sé… en el último viaje escucho el vago repique de campanas de despedida y otra mañana.
y otra voz, igual que yo, con diferente acento,
canta a los cuatro vientos
afortunado
¡Qué suerte tuve de nacer!—
Y… mañana es 8 de septiembre. ¡Feliz cumpleaños!
Castillo de la Natividad P.
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