Su nombre científico «Danaus plexippus» proviene de dos fuentes: «Danaus» es un homenaje al príncipe mitológico libio Dánao, y «plexippus» se deriva de Plexippus, uno de los compañeros de Hércules, hijo de Zeus, en la mitología griega.
Se la conoce comúnmente como la «mariposa monarca» debido a su apariencia llamativa y su importante papel en el reino de los insectos.
Tiene alas anaranjadas y negras, y existen diferencias sutiles entre las otras especies que permiten a los expertos distinguirlas.
Los machos liberan feromonas para atraer a las hembras, las cuales juegan un papel importante en el sexo y la reproducción.
Las hembras ponen sus huevos individualmente en las hojas de la planta huésped. Cada hembra puede poner hasta 400 huevos en su vida.
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Las orugas de la monarca se alimentan exclusivamente de la planta Asclepias (algodoncillo), que contiene toxinas desagradables para los depredadores.
Sus colores y patrones brillantes advierten a los depredadores de su toxicidad.
Una de las características más notables de la monarca es su migración anual. A medida que se acerca el otoño en América del Norte, millones de mariposas se embarcan en un espectacular viaje hacia el norte desde el sur de Canadá hasta México y algunas zonas costeras de California.
Esta migración puede cubrir una distancia de hasta 4.500 kilómetros y completar varias generaciones de mariposas.
La próxima generación es muy diferente a las demás. Los adultos migratorios viven hasta ocho o nueve meses.
Todavía se está investigando cómo la especie regresa a las mismas áreas de espera después de varias generaciones; los patrones de vuelo se heredan en función de una combinación de ritmos circadianos y la posición del sol en el cielo.