– Infórmate Venezuela –
Hay una serie de opciones de carreras o profesiones en el mundo. Los padres deberían tener preocupaciones legítimas sobre la formación de sus hijos y su lugar en el mundo, y deberían tener mucho cuidado de no interferir demasiado con las visiones del mundo de sus hijos. elección profesional de sus hijos. A veces se ven asfixiados por la tradición familiar u otro pretexto para imponer una profesión. De ahí surgen profesionales mediocres, poco entusiastas, que aportan poco a la sociedad y no son felices. Esa interferencia disfrazada de preocupación de los padres es una forma de esclavitud. Cada uno debería ser libre de elegir su profesión.
Desafortunadamente, hay una sobreestimación entre nosotros. cursos universitarios. Los padres quieren que sus hijos se gradúen en artes liberales, no como artistas o artesanos. Sin embargo, un oficio con educación y técnicas es tan valioso o más caro que un título universitario. Digo «o más valioso» porque independientemente de la situación política o económica de cualquier país, siempre hay necesidad de artesanos, y muchos profesionales cierran las puertas de sus oficinas. No se requiere arquitecto porque la construcción está paralizada, pero siempre se debe acudir a un buen fontanero para que repare la tubería. El arte, la plástica, la música u otros géneros, así como el deporte, serán siempre un refugio para la población en crisis. Padres, ¿por qué os resistís a que vuestros hijos elijan estos caminos?
Otras formas esclavitud educativa Pueden ser implementadas por regímenes políticos despóticos y por el imperialismo económico, cerrando universidades y escuelas, abriendo carreras que sirvan sólo a sus propios intereses. Otra forma actual de esclavitud es la trata de esclavos, un trágico problema de emigración, trata de blancas y pornografía infantil. ¿Por qué trato este tema hoy? Ya verás.
Porque quiero hablar de lo contrario, de lo más grande. El regalo de Dios al hombre: ¡la libertad! No entendemos completamente la naturaleza de este regalo. El libre albedrío existe, eso es un hecho. Sin él no habrá santos, aquellos que eligen el bien. Pero también es posible elegir el mal. Esto es lo que ha hecho una parte de la humanidad. Desafortunadamente, somos libres de acudir a Dios y también de negarlo. Sin esta dualidad opuesta no habría mérito ni recompensa con bienaventuranza eterna.
Historia humana Es un conflicto constante entre el bien y el mal. El hombre, al ser un animal racional y libre, muchas veces comete errores y elige una vida, un destino lleno de ambiciones personales económicas y de poder. Incluir antagonismos étnicos, religiosos o ideológicos. El resultado es fanatismo y crisis. Así es como vivimos en este mundo.
Sin embargo, no podemos permitirnos ser oprimidos por el mal. Si la historia está llena de estos conflictos, también está llena de hombres y mujeres que se levantaron y heroicamente lograron corregir algún rumbo. Hemos tenido muchos héroes y santos que no permitieron que la humanidad ni la nación cayera por completo. ¿Por qué no los recibimos hoy? Es hora de que cada uno de nosotros hagamos nuestra parte. Necesitamos revisar nuestras vidas y corregir nuestras debilidades.
Todas las naciones expresan su deseo de libertad, basta con escuchar sus himnos nacionales. De los seis países bolivarianos, sólo dos no mencionan la palabra libertad o libertad, Panamá y Ecuador, a pesar de que son himnos de paz en libertad. Alguien de Colombia dice: … La gran libertad arroja su luz invencible; Uno de Perú comienza: Somos libres, seamos siempre libres.; Alguien de Bolivia dice: …y en voz alta: ¡Libertad!, ¡libertad!, ¡libertad! Y el de Venezuela: …el pobre de la cabaña pidió libertad.
El deseo de libertad es real. y permanente en el hombre, porque Dios le ha dotado para ello. Nadie puede negarse a tenerlo, a quedarse dormido ante el abuso de poder y la destrucción de los opresores. Venezuela no puede rendirse. Ya basta de 25 años de vergüenza. Es hora de reaccionar. No podemos aceptar esta ilegitimidad de un gobierno falso. No tiene derecho a descalificar candidatos a través de entidades no responsables, incluida la descalificación sin ningún motivo; El Presidente no tiene derecho a cambiar la fecha de las elecciones en contra de la Constitución. Bueno, arrojemos tanta basura al mar.
Aquí no debería haber elecciones, porque el 22 de octubre ya se eligió al pueblo. Los números que obtuvo María Corina Machado Ya están decididos en las primarias. Lo que se necesita aquí bajo un liderazgo claro y eficaz es una revuelta popular permanente, ni diálogos ni compromisos. No hay más combustible para el malvado régimen. Tendrá las armas -no todas- pero no la razón ni la resolución de la gente enojada.
Presidenta de la República: ¡María Corina Machado con aplauso popular!
Alicia Álamo Bartolomé
– Infórmate Venezuela –